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sábado, 21 de enero de 2012

Doral reporta sus números para el 2011

Doral Financial Corp. (NYSE:DRL) terminó el 2011 con unos $10.7 millones en pérdidas netas, pero con mejores indicadores en su margen neto de interés, una estabilización del deterioro de sus activos y frutos concretos de una estrategia de sustitución de activos principalmente fuera de Puerto Rico, subrayó ayer el principal oficial ejecutivo del conglomerado, Glen R. Wakeman.
Pese a cerrar en negativo, el desempeño de Doral para el 2011 fue mejor en relación al 2010 cuando la institución perdió $291.9 millones. Para los accionistas, el desempeño anual de Doral significó una pérdida de 16 centavos por acción común. En el 2010, Doral perdió $291.9 millones o unos $2.96 por acción común.
En cambio, en el cuarto trimestre del 2011, Doral devengó ingresos de $11.7 millones. En esencia, la ganancia estuvo vinculada a dos transacciones contributivas. La primera fue la fusión de la licencia del banco en Nueva York con la licencia en la Isla, lo que le ahorra unos $1.7 millones en el pago de contribuciones y la segunda fue una reducción en las reservas de su activo de impuestos diferidos. Esa reducción responde a un mejor desempeño de la institución y significó otros $7.1 millones, se indicó.
El mercado pareció validar la gestión del banco cuando ayer, el título bancario en Wall Street avanzó un 6.92% en Wall Street para situarse en $1.39.
“Hemos hecho avances sustanciales y sostenidos a la compañía”, dijo Wakeman durante una conferencia telefónica con diversos analistas que siguen la institución.
Según Wakeman, a lo largo del 2011, Doral pudo hacer ajustes que resultaron en mejoras al margen neto de interés como, por ejemplo, reducir en al menos 15 ocasiones, las tasas de interés que paga a los depositantes en Puerto Rico. “Esperamos continuar moviendo las tasas hacia la baja en el 2012”, indicó el banquero.
En contraste, Wakeman indicó que durante el presente año, la institución se propone duplicar su monto de depósitos a nivel continental y que se ubicó en unos $320 millones en el 2011.
Según el banquero, otro acierto de la institución fue lograr sustituir ciertos activos de su institución (como préstamos de construcción y comercial), logrando financiamientos en Estados Unidos, en especial, en el segmento de salud, donde Doral ya ha suscrito unos $30 millones y podría alcanzar hasta $100 millones a futuro.

Millonario reclamo por el colapso de R-G Premier Bank

La Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) demandó ayer a 19 directores y altos oficiales del fracasado R-G Premier Bank por éstos incumplir con sus deberes de fiducia y negligencia crasa, acciones que, se alega, provocaron una pérdida al regulador federal ascendente a unos $1,496 millones.
La demanda por daños civiles y la solicitud de un juicio por jurado por parte de la FDIC también se hizo extensiva  a la aseguradora XL Specialty Insurance Company.

La FDIC pretende recobrar de los demandados al menos $257 millones, ya que, entre otras cosas, éstos crearon una estructura prestataria “deficiente” que se hizo evidente en al menos 77 préstamos, los que se aprobaron casi de manera “robótica” y aún cuando cualquier “banquero prudente” debió saber que probablemente “nunca serían pagados”.
La demanda de la FDIC se produce unos 22 meses después de que la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF) cerrara R-G Premier Bank por insolvencia y designara a la FDIC como síndico liquidador. El regulador federal, a su vez, vendió parte de los activos a Scotiabank en un acuerdo de pérdida compartida que, entre otras cosas, le obliga a absorber una parte de la pérdida por préstamos incobrables emitidos por R-G Premier, por al menos cinco años.
R-G Premier Bank surgió en 1994, luego de que el fundador de R&G Mortgage, Víctor Galán Alvarez, adquiriera, cuatro años antes, un pequeño banco y lo llamara R&G Federal Savings Bank, reza la demanda. Eventualmente, el banco comercial se convirtió en una subsidiaria de R&G Financial Corp.
De acuerdo con la base de datos de la FDIC, el fracasado R-G Premier Bank ocupa la séptima posición que más pérdidas ha provocado al regulador federal desde la crisis financiera del 2008. Desde entonces, han francasado sobre 400 instituciones financieras aseguradas por la FDIC en Estados Unidos y Puerto Rico.

Infundado el reclamo federal

En lo que parece ser el principio de una larga batalla judicial, los abogados de varios exdirectores y oficiales de R-G Premier Bank indicaron a El Nuevo Día que las imputaciones hechas por la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) contra sus representados son infundadas y responderán a los alegatos del regulador federal.
“Estamos decepcionados de que la FDIC haya radicado estos reclamos infundados contra nuestros clientes”, indicó la abogada Mary C. Hill.
La abogada representa al fundador de la fallida institución, Víctor Galán Álvarez y al hijo de éste, Víctor L. Galán Fundora. Galán Álvarez fundó, dirigió y presidió la junta de directores de la institución bancaria, mientras que Galán Fundora se desempeñó como director de la institución, al igual que como el ejecutivo de mayor rango en la subsidiaria hipotecaria R-G Mortgage.
Según Hill, quien es parte del bufete Alston & Bird con sede en el estado de Georgia, ambos ejecutivos han cooperado con la investigación que llevó a cabo la FDIC y “siente orgullo” de la institución que sirvió a la comunidad de Puerto Rico por casi 30 años.
“Desafortunadamente, como tantos otros bancos, R-G Premier no pudo resistir la crisis financiera, cuya profundidad y severidad no había tenido precedente en nuestras vidas”, sostuvo Hill. “Esperamos responder esta demanda y vindicar el honor y la reputación de los Galán”.
En tanto, Breon S. Peace, del bufete Cleary Gottlieb Steen & Hamilton, con sede en Nueva York, coincidió al indicar que los alegatos de la FDIC contra sus representados son “infundados”.
“Mis clientes desempeñaron sus deberes honorablemente y con cuidado”, indicó Peace. “Ellos no actuaron negligentemente; tampoco incumplieron con ninguno de sus deberes de fiducia hacia la institución”.
Peace representa al exprincipal oficial ejecutivo de la institución financiera al momento de su cierre, Rolando Rodríguez Mancebo; al expresidente de los directores, Juan Agosto-Alicea y a los directores Laureano Carus, Ileana M. Colón Carlo, Benigno R. Fernández Rosario, Melba Figueroa Padilla, Roberto Gorbea Frontera; Eduardo McCormack; Iván Méndez, Rafael Nin Torregrosa, Gilberto Rivera Arreaga y Enrique Umpierre Suárez.
“Mis clientes tienen defensas fuertes a los reclamos (de la FDIC) y los defenderemos vigorosamente contra estos”, agregó Peace.
Habla el Comisionado
En tanto, aunque hizo hincapié en que no emitiría juicio alguno acerca del litigio, el comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), Rafael Blanco, manifestó que la demanda de la FDIC contra 19 exdirectores y oficiales de R-G Premier debe verse como “un mensaje claro” acerca del rol que tienen las juntas de directores de velar por las instituciones que dirigen.
Según Blanco, por los pasados tres años, la FDIC ha hecho reclamos similares a los contenidos en la demanda de R-G Premier en todo Estados Unidos. Y tales litigios están dirigidos a recuperar pérdidas, para evitar el desembolso del dinero de contribuyentes en otros eventos, pero también reafirman la seriedad que supone un alto puesto ejecutivo o directivo en una institución financiera.
“Muchos de estos pleitos civiles terminan en transacciones, pero se envía el mensaje a la banca que queda de que las juntas de directores tienen unas responsabilidades y se va a velar porque se cumplan”, indicó.
las juntas de directores
“Las juntas de directores tienen unas responsabilidades. No es estar (en la institución) un rato y aprobar todo lo que le pongan en la mesa”, sostuvo el nuevo regulador del sistema financiero de la Isla.
“Las altas direcciones de los bancos tienen que tener una segregación de funciones que permitan la independencia de criterio y la autoridad no puede estar concentrada en una sola persona. Creo que ese es el mensaje, que claramente, está enviando (la FDIC), en todo Estados Unidos y aquí”, continuó diciendo Blanco.
El regulador bancario estatal subrayó que los reclamos del regulador federal suelen ser resultado de procesos de investigación o análisis forense, pero esas alegaciones tendrán que ser probadas en los foros pertinentes, donde las personas demandadas también tendrán su oportunidad para hacer sus planteamientos.
Esta semana, El Nuevo Día divulgó la demanda de la FDIC, la primera de este tipo que se produce en la Isla en unas dos décadas.
En dicho litigio, la FDIC alega que los directores y oficiales de R-G Premier incurrieron en negligencia crasa -al aprobar préstamos riesgosos y no supervisar adecuadamente a la institución- provocando el colapso del banco en abril de 2010.
El intento de reclamo se extiende a 17 cónyuges, las sociedades gananciales y la aseguradora XL Specialty Insurance. Las pérdidas estimadas por la FDIC a causa del colapso de R-G Premier rondan unos $1,496 millones. De esa cifra, la institución pretende recobrar al menos $452 millones. El seguro de directores y oficiales, adquirido por la institución para proteger a sus directivos ascendía a $35 millones.

sábado, 14 de enero de 2012

FirstBank retira sus preferidas de la bolsa

Las acciones preferidas de First Bancorp. (NYSE:FBP) dejarán de cotizar en ese mercado a partir del 17 de enero de este año, ahora que la institución completó el proceso requerido por el regulador de valores federal.
A finales de diciembre, el conglomerado financiero notificó al mercado que removería sus acciones preferidas de la bolsa neoyorquina y el pasado 3 de enero, ante la Comisión de Bolsas y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) formalizó sus intenciones de remover las cinco series de acciones preferidas no acumulativas perpetuas (FBPPrA/E).
La determinación de la matriz de First Bank supone el fin procesal de la recapitalización y la transformación de la base de capital del conglomerado financiero, a petición de los reguladores bancarios. Dicho proceso requirió el intercambio de las acciones preferidas del conglomerado por acciones comunes, transacción que se completó en agosto de 2010 y permitió el intercambio de aproximadamente un 89% de las acciones preferidas. De igual forma, supone el fin de una era para cientos de inversionistas locales que por años recibieron un flujo de efectivo por dividendos mensuales de entre 7% y 8.35%.
Ejecutivos bancarios y de inversiones en la Isla han estimado, preliminarmente, que la desaparición de las acciones preferidas emitidas por instituciones financieras en la Isla como Popular Inc., Doral Financial Corp. y aquellas de bancos fracasados como Westernbank, supuso una pérdida de unos $900 millones en ingresos a los accionistas locales.