En Puerto Rico, seis de cada 10 personas no trabajan y de los cuatro que trabajan uno labora en el sector público.
A juicio de Juan Carlos Hidalgo, analista de política pública en América Latina para el Instituto Cato –con sede en Washington, D.C.– urge que la Isla aumente su tasa de participación laboral para poder desarrollar la economía.
No obstante, el analista –miembro del Instituto que se cataloga no partidista– negó que el gobernador Luis Fortuño sea el responsable de la baja participación laboral en el País.
Hidalgo sostuvo que se trata de “un problema sistémico” que incluye entre otros factores “el alto salario mínimo que existe en Puerto Rico y que genera desempleo”.
“Sé que cuando hice las declaraciones, miembros del partido opositor las utilizaron para atacar al Gobernador como si fuese el responsable de la baja participación laboral, pero esto es un problema sistémico”, sentenció.
El analista visitó la Isla la semana pasada como parte de un foro económico organizado por Iniciativa Libre.
“El desempleo en el área juvenil es de 40 por ciento. El salario mínimo tan alto está afectando las posibilidades de empleo y, por otro lado, las transferencias de fondos federales que promueven el asistencialismo social”, amplió en entrevista con EL VOCERO.
Hidalgo reconoció que el plantear cambios al salario mínimo federal es un tema delicado en la política isleña. Sin embargo, en su opinión, es impostergable.
Hidalgo reconoció que el plantear cambios al salario mínimo federal es un tema delicado en la política isleña. Sin embargo, en su opinión, es impostergable.
“Los requisitos para entregar ayuda federal se establecen de acuerdo a las tasas de ingreso de Estados Unidos y no guardan relación con las de la Isla y esto hace que más de la mitad de los puertorriqueños reciban estas ayudas y desalienten la búsqueda de empleo”, subrayó.
“La plata que reciben con ayudas es prácticamente lo mismo que recibirían por trabajar”, añadió.
Hidalgo advirtió que es preocupante que “cuando la gente no trabaja y no adquiere las habilidades se está generando una carga tremenda para la sociedad puertorriqueña en el futuro, con una generación perdida”.
“Esto eventualmente le va a pasar un costo a la economía puertorriqueña y a su sociedad”, sentenció.
Por último, el analista alertó que “Puerto Rico no puede esperar que el Gobierno federal esté ahí siempre para hacer transferencias y pagarle la cuenta, porque los recortes que vienen de Washington, tarde o temprano provocarán que se mire el gasto en la Isla”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario