En las últimas semanas hemos visto como el precio del petróleo sigue un patrón de inestabilidad, debido a las continuas protestas contra los gobiernos en el Oriente Medio y en el norte de África. La mayor concentración de este preciado líquido se ubica en toda esta región, especialmente en Arabia Saudita. Todas las potencias mundiales tienen sus ojos puestos sobre Libia, donde la guerra civil ha puesto las reservas de ese país en peligro. Actualmente el precio por barril de petróleo se ubica en $101.09, esto después de haber llegado a niveles records en el mes de febrero. La incertidumbre que esta situación crea, provoca que los inversionistas se conviertan más pesimistas y por ende se dispara el precio.
A su vez el precio de la mayoría de los bienes también sube, pues la mayoría de ellos dependen del costo de la transportación. De hecho el precio de la comida a nivel mundial, especialmente el de los cereales, ha alcanzado niveles records en el mes de febrero. Esto crea una situación muy complicada para la recuperación económica mundial, pues el alza desmesurada en los precios puede provocar un alto nivel de inflación en un periodo relativamente corto. Lo que añadiría más dificultades para la economía local de la isla, pues la mayoría de nuestros alimentos son importados y podríamos experimentar unos precios demasiado elevados. Algunos analistas predicen que en algún momento del año podríamos ver el precio del petróleo por barril en los $200.
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